¿La violencia viene de adentro?

«No vemos las cosas tal como son; las vemos como somos nosotros», dice la frase que algunos atribuyen a Kant y otros a Krishnamurti. El autor es lo de menos, lo importante es el concepto: vemos en el mundo exterior aquello que conocemos porque es parte de nuestro mundo interno.

Geoff Thompson (1960, Inglaterra) llegó a una conclusión similar respecto al tema de la violencia. Thompson es escritor, docente e instructor de artes marciales. Trabajó como guardia de seguridad en un club nocturno de su pueblo natal, Coventry, uno de los sitios con más altos indices de criminalidad de Inglaterra. Esa experiencia lo inspiró para escribir su autobiografía «Watch My Back». Durante muchos años se dedicó a enseñar artes marciales y defensa personal, hasta que un día cambió su manera de entender el fenómeno de la violencia. Sobre eso habla en esta entrevista para el programa London Real

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Geoff Thompson: (…) Es un nivel, es definitivamente un nivel de conciencia. En el nivel más bajo, uno se dedica a enseñar técnicas físicas de defensa personal; no demasiadas. Es porque uno está vibrando en una frecuencia tan baja que empieza a crear violencia desde ese lugar.  Yo era una persona muy insegura. Le tenía tanto miedo al mundo que, literalmente, creaba con mi poderosa imaginación situaciones violentas en cualquier sitio a dónde fuera, clubes nocturnos, bares, casamientos; estaba literalmente en cientos de peleas.

Trabajaba como guardia de seguridad y estuve metido en centenares de peleas. Cuatro de mis amigos murieron, dos de ellos asesinados. Era una época muy violenta.

Pero me di cuenta de que yo estaba creando eso. Tenía armas en cada rincón de mi casa, mi cuerpo estaba cubierto de tatuajes, tenía una armadura corporal. Me quité lo bonito, no quería ser tocado, no quería ser abusado, había construido esta enorme armadura. Con esas habilidades, fui al mundo y creé violencia. Era un millonario en violencia.

El momento más excitante de mi transformación fue cuando me di cuenta de que yo mismo la estaba creando. Le decía a mi esposa: “a cada lugar que voy veo violencia” y ella me respondió: «lo que tenés que observar es que la pelea está en los lugares a los que VOS vas».

Entrevistador: Conozco un peleador del UFC apodado “War Machine” que decía lo mismo. Estuvo preso por un año y salió hace poco. Decía: “salgo con mis amigos y la violencia siempre me encuentra. ¿Qué está pasando? La violencia viene a mí y no me la puedo sacar de encima”.

Geoff Thompson:  Por supuesto, yo terminaba siempre en un ambiente violento porque yo era el summum de eso. (…) Cuando mirás el mundo a tu alrededor ves a un montón de gente en un montón de niveles diferentes Cuando estuve en ese nivel, en la frecuencia de la violencia, me di cuenta de que la actitud de violencia siempre rebota porque estamos en un universo recíproco: lo que damos es lo que recibimos. Si damos mucho de algo, recibimos mucho de eso mismo. Cuando tomé conciencia de esto, me deshice de todas las armas que tenía en mi casa, de todos los libros sobre violencia, dejé de enseñar violencia, dejé de hablar violencia, dejé de escribir violencia. Me di cuenta de que yo estaba creando la violencia.

Se suele decir que cuando querés crear algo tenés que sumergirte por completo en eso. Yo creé un mundo violento porque me sumergí por completo en un mundo de violencia. Literalmente creé monstruos.

Entonces, decidí disolver todo eso. Puse en mi casa libros con pensamientos positivos, biblias, y empecé a buscar dentro mío tratando de disolver el núcleo de esa violencia. Es como atacar el corazón del dragón. El cuerpo del dragón es enorme, pero su corazón es un pequeño núcleo de ideas. En mi caso, a los 12 años me inculcaron esas ideas, que se resumen en: “el mundo es peligroso…no puedes confiar en nadie…debes construir una armadura y convertirte en alguien violento”

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Entrevista completa: http://www.youtube.com/watch?v=epveNhRBrB8
Traducción al español: Daniel y Lucía Fresno