¿Más energía…?

por Daniel Fresno—

—¿Por qué le damos tanta importancia a la respiración? —dije durante la clase de chi kung-movimiento—. Porque nos interesa el entrenamiento de la energía y desde tiempos antiguos la medicina tradicional china nos enseña que hay una intima relación entre el chi (energía vital) y el aliento, la respiración. La ciencia moderna descubrió las bases bioquímicas de este antiguo concepto taoísta.

El cuerpo está formado por células y todas ellas necesitan energía para vivir y funcionar. Dentro de cada célula hay usinas generadoras de energía llamadas mitocondrias. El proceso por el cual las mitocondrias generan energía es la oxidación de la glucosa. Para que esto ocurra se necesitan ante todo oxígeno y glucosa. La glucosa la obtenemos de los alimentos; el oxígeno, de la respiración.

Cuando nos sentimos sin energía tenemos que revisar si nos está faltando alguno de estos dos ingredientes indispensables. En la sociedad moderna lo más habitual es comer de más y, a menos que estemos sufriendo desnutrición, es poco probable que nos esté faltando glucosa. ¿Entonces qué es lo que nos falta y nos hace sentir sin energía? Oxígeno.

El avance tecnológico hizo la vida mucho más cómoda y el sedentarismo es hoy algo habitual. Estamos acostumbrados a respirar de manera superficial, incorporando poco oxígeno y eso se traduce en una pobre generación de energía. En resumen, respiramos muy poco, pero metemos en el cuerpo abundantes hidratos de carbono, que al no ser usados como combustible, se acumulan como grasa corporal. El resultado es poca energía y sobrepeso.

Lo que ocurre dentro de nosotros cuando practicamos chi kung-movimiento es que aumentamos la oxigenación del cuerpo y así potenciamos la generación de energía. Por eso al terminar la clase nos sentimos más despiertos y vitales.

Gracias por escuchar.

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